Hay miles de clientes que desfilan por los pasillos cada día, perdiéndose en las estadísticas del olvido. Pero hay clientes que reúsan a sentirse olvidados en la injusta rutina que maquilla los días. Suelen poblar con su gracia los espacios que les hacen suyos: sobre un banco amarillo frente a la barra tocando con sus dedos la frente cristalina de un móvil, junto a una silla huérfana de mesa de cualquier color , dejando escapar su curiosidad con la mirada firme sobre un cuadro que cuelga dentro del local o, simplemente recargados sobre la barra leyendo las notas deportivas de un periódico popular.
Detrás de una cultura se escriben infinidad de anécdotas.Tal como las que se escriben en cantinas, taquerias y restaurante mexicano. Madrid también es testigo de algunos sabores mexicanos ,donde se vuelve al centro mexicano, para rescatar algo del sabor mexicano que se ofrece en locales de la ciudad.
Amanecer
domingo, 15 de febrero de 2015
Una margarita sobre la mano
Hay miles de clientes que desfilan por los pasillos cada día, perdiéndose en las estadísticas del olvido. Pero hay clientes que reúsan a sentirse olvidados en la injusta rutina que maquilla los días. Suelen poblar con su gracia los espacios que les hacen suyos: sobre un banco amarillo frente a la barra tocando con sus dedos la frente cristalina de un móvil, junto a una silla huérfana de mesa de cualquier color , dejando escapar su curiosidad con la mirada firme sobre un cuadro que cuelga dentro del local o, simplemente recargados sobre la barra leyendo las notas deportivas de un periódico popular.
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